Esta semana está a punto de convertirse en un hito decisivo para la esperada reforma tributaria del gobierno del Presidente Gabriel Boric. El ministro de Hacienda, Mario Marcel, declaró en TVN que una decisión se tomará pronto, ya que el Ejecutivo revisará el futuro de esta iniciativa que propone rebajar la tasa impositiva de las empresas del 27% al 24%, complementada con un gravamen sobre los dividendos.
Marcel admitió que aún no hay un veredicto claro sobre si se dará luz verde al proyecto, señalando que la oposición ha mostrado resistencia a aceptar medidas compensatorias, lo que ha hecho la negociación más difícil. A medida que la guerra comercial global genera inquietudes sobre una posible recesión, el gobierno revela su intención de discutir medidas que animen la economía, enfatizando que esta iniciativa justifica su carácter reactivador.
El ministro también respaldó el compromiso del gobierno con las pequeñas y medianas empresas (pymes), afirmando que la modificación de su régimen tributario es una prioridad. “Buscamos un sistema más eficaz y beneficioso”, comentó, reiterando el deseo del Ejecutivo de favorecer a este sector.
Además, Marcel se refirió a las recientes barreras arancelarias impuestas por EE.UU., señalando que el impacto de estos impuestos sobre el comercio internacional es una seria amenaza para la economía chilena. El gobierno chileno participará en múltiples rondas de negociaciones con EE.UU. para discutir estas aranceles, enfocándose en la importancia de su Tratado de Libre Comercio.
El análisis de Marcel de la situación refleja su preocupación sobre cómo las decisiones comerciales estadounidenses podrían afectar la economía chilena, especialmente en relación con el cobre, un recurso esencial para la industria norteamericana.