La reciente resolución del Tribunal Constitucional que obliga a Isabel Allende a abandonar su escaño en el Senado ha puesto en juego no solo su puesto, sino la siguiente jugada política del Partido Socialista (PS). La exsenadora ha tomado la decisión de quien ocupará su asiento, un movimiento que será validado por el Comité Central del PS durante su reunión de este sábado.
Paulina Vodanovic, presidenta del partido, realizó un gesto significativo hacia Allende al permitirle elegir a su sustituto, lo cual refuerza el liderazgo de la exsenadora a pesar de su destitución por su vinculación con la fallida compraventa de la casa de su padre, Salvador Allende. Este martes, Allende se reunió con dos potenciales sucesores: Andrés Santander y Tomás de Rementería, siendo este último el elegido para tomar su lugar.
El caso de Rementería es interesante, ya que, siendo oriundo de Viña del Mar, el partido siente que representa adecuadamente a la región de Valparaíso, especialmente cuando se aproximan elecciones senatoriales. Sin embargo, su candidatura se enfrenta a un dilema: su pareja, Karol Cariola del Partido Comunista, también competirá en la misma circunscripción, lo que podría complicar sus posibilidades.
El PS, en busca de fortalecer su presencia política, deberá considerar no solo el reemplazo de Allende, sino también si apoyará a Carolina Tohá en las primarias presidenciales o lanzará una candidatura propia, donde la figura de Vodanovic también resuena con fuerza. Esta decisión no solo impactará el futuro inmediato del partido, sino que también podría definir el rumbo del progresismo en Chile en un momento crucial.